Estamos en la época del año con más posibilidades de incidencia en nuestro coche. Las bajas temperaturas pueden jugar un mala pasada y hacer que nuestro vehículo no funcione.

Tener en cuenta algunas consideraciones y consejos, nos hará que ante un imprevisto, sabremos cómo solucionarlo.

La primera consideración para minimizar el riesgo de avería durante todo el año es hacer un buen mantenimiento del vehículo. Las revisiones periódicas nos evitará disgustos y dinero.

Las situaciones más frecuentes que podemos encontrarnos ante una avería en nuestro coche son:

  • Vaho en el parabrisas: La diferencia de temperatura entre el exterior y el interior del coche produce esta molesta situación. Pasar un trapo no es muy recomendable, puesto que extenderemos el polvo acumulado por todo el parabrisas. Lo más conveniente es utilizar el sistema de aire caliente del vehículo dirigiendo el flujo al parabrisas para compensar la diferencia de temperatura. Si el coche tiene la función desempañar del climatizador, será la mejor opción para usar.
  • Placas de hielo en los vidrios: Ante esta circunstancia, nunca se puede echar agua y poner en marcha el limpia parabrisas, puesto que éstos podrían estar pegados a la luna y averiarlos. Todavía peor seria echar agua caliente porque al contraste de temperatura, el vidrio podría romperse. La mejor opción seria poner el motor en marcha y dirigir la calefacción a máxima velocidad hacia la luna. Si nos encontramos que la placa de hielo es muy gruesa podríamos usar alcohol, porque el punto de congelación es más bajo que el agua. Si no es suficiente y como último recurso, sería la utilización de una tarjeta o espátula. Y por último, ahora si podremos hacer uso del limpia parabrisas.
  • Nieve en la carretera: Dependiendo de la cantidad, tendremos que utilizar cadenas o neumáticos. En todo caso, la precaución en la hora de conducir será imprescindible.
  • La cerradura está congelada: Nunca intentar forzar la cerradura. La manipulación con herramientas podrían dañar el mecanismo y romperlo o dañarlo de forma que la cerradura quedara inservible. La mejor alternativa seria usar alcohol (igual que para el parabrisas) y un secador si se tiene a mano. La utilización de lubricantes podría ser una buena solución.

Pequeños consejos que en caso de encontrarte con estos inconvenientes en invierno, serán de mucha utilidad.

Ante estas situaciones es muy importante pensar tranquilamente y considerar la mejor opción según las recomendaciones.

¡Esperamos que sea de utilidad!

Goncal Formació
Cornellà, 17 de enero de 2022